martes, marzo 29, 2022

La aportación de Rusia a la paz, la libertad y la democracia (resumen)


1922

Nace la URSS después de la guerra civil

1932-33

Cuatro millones de ucranianos fueron asesinados por inanición al incautarse las autoridades de Moscú todo el pan, el trigo y los alimentos

1933

Más de 400.000 miembros fueron expulsados del PCUS


Arrestos y condenas de la policía secreta (OGPU, NKVD), 1930-193910

Año

Arrestos

Condenados

Condenas

Ejecutados

A campos y prisión

Exilio

Otros

1930

331.544

208.069

20.201

114.443

58.816

14.609

1931

479.065

180.696

10.651

105.683

63.269

1.093

1932

410.433

141.919

2728

73.946

36.017

29.228

1933

505.256

239.664

2154

138.903

54.262

44.345

1934

205.173

78.999

2056

59.451

5994

11.498

1935

193.083

267.076

1229

185.846

33.601

46.400

1936

131.168

274.670

1118

219.418

23.719

30.415

1937

939.750

790.665

353.074

429.311

1366

6914

1938

638.509

554.258

328.618

205.509

16.842

3289

1939

 

 

2552

54.666

3783

2888


1945

En la S.G.M. tuvo 26,6 millones de muertos, entre militares y población civil. Los soldados iban al frente compartiendo un fusil para cada 5.

14/05/1955

la Unión Soviética creó el Pacto de Varsovia.

04/11/1956

El ejército soviético movilizó 31.550 soldados y 1130 tanques​ para invadir Budapest y otras regiones del país.

13/08/1961

La URSS comienza a construir el muro de Berlín.

21/08/1968

Más de 200.000 soldados y 2.300 tanques invadieron Checoslovaquia. Adiós a la llamada “Primavera de Praga”.

1979

Invasión de Afganistán

1990-99

Desintegración de la URSS (1991) Guerras con Chechenia.

12/08/2000

El naufragio del submarino K-141 Kursk tuvo lugar durante el primer ejercicio naval importante de Rusia en más de diez años, en el mar de Barents el 12 de agosto de 2000, muriendo los 118 tripulantes de a bordo. Las autoridades se negaron a aceptar ayuda de países extranjeros.


Las otras víctimas de Putin.

Alexei Navalni

Sobrevivió de milagro al envenenamiento que sufrió por parte de Moscú. Actualmente encarcelado por una mofa de juicio.

Sergei Skripal

Un ex agente doble ruso que pasó secretos a la inteligencia británica, Skripal, de 66 años, y su hija Yulia, de 33, fueron encontrados inconscientes en un banco frente a un centro comercial en la ciudad catedralicia inglesa de Salisbury en marzo de 2018.

las autoridades británicas concluyeron que habían sido envenenados por Novichok, un grupo de agentes nerviosos desarrollados por el Ejército soviético en las décadas de 1970 y 1980.

Vladimir Kara-Murza

El activista de la oposición rusa sostiene que sufrió varios intentos de envenenamiento en 2015 y en 2017. Un laboratorio alemán encontró niveles elevados de mercurio, cobre, manganeso y zinc en él, según informes médicos vistos por Reuters.

Alexander Litvinenko

El ex agente de la KGB y crítico abierto del presidente ruso Vladimir Putin murió a los 43 años después de beber té verde mezclado con polonio-210, un isótopo radioactivo raro y potente, en el Hotel Millennium de Londres, dijeron las autoridades británicas.

Alexander Perepilichny

El ruso de 44 años fue encontrado muerto cerca de su lujosa casa en una exclusiva propiedad privada en las afueras de Londres después de haber salido a correr en noviembre de 2012. Perepilichny buscó refugio en Reino Unido en 2009 después de ayudar en una investigación suiza sobre un plan de lavado de dinero ruso.

Viktor Yushchenko

Entonces líder de la oposición ucraniana, fue envenenado durante la campaña para las elecciones presidenciales de 2004 en las que se presentó en un ticket pro-occidental contra el primer ministro pro-Moscú, Viktor Yanukovich.Dijo que fue envenenado mientras cenaba fuera de Kiev con funcionarios de los servicios de seguridad ucranianos

Georgi Markov

Markov, escritor, periodista y opositor búlgaro del entonces liderazgo comunista de su país, que desertó a Occidente en 1969, murió el 11 de septiembre de 1978 después de sentir un agudo pinchazo en el muslo mientras esperaba un autobús en el puente de Waterloo de Londres. Según los relatos del incidente, Markov miró hacia atrás y vio a un hombre que recogía un paraguas que había caído al suelo.

Anna Politokvskaya

La periodista más crítica con el presidente ruso, que fue asesinada de un tiro en la cabeza

Mijaíl Jodorkovski

era el hombre más rico de Rusia... hasta que desafió a Putin. Tras denunciar la corrupción en el Kremlin, fue condenado a nueve años de cárcel

Borís Berezovski,

que se convirtió, exiliado en Londres, en el opositor más feroz a Putin. Sobrevivió a varios atentados y murió ahorcado en 2013.

Borís Nemtsov

Acribillado a balazos al lado del Kremlin murió en 2015

El también disidente Nikolai Glushkov

murió de forma misteriosa en 2018.





lunes, marzo 07, 2022

Los del Servicio Andaluz de Salud (enésima parte)

El pasado 16/11/2021 tuve una cita con mi especialista preferido en el hospital de Málaga. La anterior fue el año anterior, concretamente el 11/11/2020.

De la última consulta salí con una sugerencia por parte del médico. Debía esperar que me confirmaran la fecha para unas pruebas y al mismo tiempo, la siguiente cita con él. La sugerencia hablaba de que la fecha de las pruebas serían “a partir de abril de 2022”. Estaba de suerte: era probable que me citaran en solo 6 meses.

Al cabo de unos meses recibo por el conducto normal, o sea, por correo ordinario, ambas citaciones, una para las pruebas el 20/05/2022 y otra para la cita con el especialista unos días después.

Por sorpresa, hace unos días recibo una nueva notificación por correo ordinario en la que me cambian la fecha del 20/05/2022 por una nueva el 19/05/2022 y con una nota bien visible en el documento en el que se me indica que esta cita cancela cualquier otra anterior. Vale. Hemos ganado un día.

Dice el viejo refrán que más sabe el diablo por viejo que por diablo.

Hoy me ha dado por verificar en la aplicación online disponible del SAS, si la nueva fecha era correcta. No me fío de éstos. Y he hecho bien: en la aplicación online, la fecha NO es la del 19/05/2022 sino la del 16/05. Las fechas no coinciden.

Ahora, imaginemos que a mí no se me hubiera ocurrido verificar lo que, en principio, parecía obvio: que la fecha estaba bien. ¿Qué habría pasado? Pues que me habría desplazado hasta el hospital, en Málaga, y que la enfermera me habría dicho que tendría que pedir una nueva cita porque a la que yo tenía, no acudí. Y eso explícaselo a alguien sin un PC delante para poder demostrárselo. Aunque daría igual. 

Sigamos imaginando. Pensemos en un señor mayor, de esos que rondan o superan los 80 años, que vive un pueblo, no en la capital; que su conocimiento de la tecnología ha alcanzado su máximo esplendor cuando llama por el móvil a su hijo o su nieto. Que no dispone de coche propio porque por la edad, ni necesita coche ni tiene carné y que, por tanto, para sus desplazamientos necesita contar con la ayuda de algún vecino, amigo o familiar. Y que se encuentra con el mismo problema que he tenido yo.

Y alguno dirá: “hombre, un fallo lo tiene cualquiera”. Es cierto, uno sí, pero no es la primera vez.

Hace unos meses tenía una cita en el hospital de Benalmádena. A mí me supone 10 minutos desde que salgo de casa, aparco y entro en el hospital, pero no todo el mundo tiene esa suerte.  Y cuando me presento me dice la recepcionista que me he equivocado de fecha. Que ese no era el día. Y entonces ve a demostrarle a la pobre administrativa, que la cita era correcta, que te la había dado por teléfono alguna tarada que estaría pensando en cualquier cosa excepto en poner bien la fecha. ¿Seguimos imaginando?

Yo comprendo todo eso del sufrimiento de los profesionales de la salud, de la sobrecarga de trabajo, el que quieran cambiar de profesión (no les aconsejo la informática, de verdad) y todo eso, pero me pregunto: ¿se equivocan igual dando medicinas a los pacientes o muestran su torpeza solo a la hora de poner las fechas de las citas? ¿Son conscientes del impacto que tiene en las agendas de los distintos profesionales y en los pacientes ese tipo de errores? ¿Son conscientes de que eso forma parte de la sobrecarga de trabajo en otros compañeros de profesión? Porque está claro, que cuando se produce un error de estas características, al paciente hay que proporcionarle una cita nueva cuanto antes y no puede esperar otros 6 meses, con lo que la nueva cita hay que meterla a martillazos en la agenda.

De verdad, ¿resulta tan complicado? ¿De verdad es cuestión de contratar a un millón de personas para que no equivoquen las fechas? 

Es importante terminar aclarando que el teléfono que supuestamente sirve para que te atiendan, NO EXISTE. Así es que para informar como paciente y ciudadano de la confusión en las fechas no me ha quedado otra alternativa que enviar un email.

Ya he empezado el rosario por los misterios dolorosos.


 

sábado, marzo 05, 2022

¿Qué ha cambiado?

Crecí viendo el asesinato de JFK y después el de Lee H. Oswald. La guerra de Vietnam la teníamos casi en directo en el telediario. Los enfrentamientos y las palizas que daban los policías blancos a los negros que luchaban por sus derechos civiles en EEUU. Más tarde también vimos cómo asesinaban a Bobby Kennedy. En 1961 los rusos (siempre los rusos) levantaban el muro de Berlín. Después también vi cómo eras acribillados los que intentaban cruzar al otro lado de ese muro. En 1968 los tanques de la URSS (siempre la URSS) invadían Checoslovaquia para imponer SU orden. Y antes de terminar los 60, asesinaron en EEUU a Martin Luther King.

Me saltaré los 70 con Pinochet, los milicos argentinos, los golpes de estado en Latinoamérica, Pol Pot en Birmania y demás.

En 1980 la URSS (otra vez los rusos) invaden Afganistán. Helicópteros de quinta generación contra fusiles de la Gran Guerra.

Nada de eso me afectó más allá de guardar los recuerdos en mi memoria y de sobresaltarme con algunas escenas.

En los 90, los Balcanes. Serbios, croatas y musulmanes dando rienda suelta (unos más que otros) a sus ancestrales diferencias. Incluso los aviones de la OTAN al mando de Javier Solana, bombardearon posiciones serbias. Eso ya era harina de otro costal. Eso seguía siendo Europa, a finales del siglo XX y era incomprensible una guerra como aquella. Una guerra de aniquilación del otro. Lo de Sbrenica permanecerá en la memoria para siempre. Pero aún así, tampoco me afectó demasiado, más allá de la vergüenza de ser europeo.

Y sin embargo esto de Ucrania me ha conmovido en lo más profundo. Ha despertado dentro de mí una mezcla de sentimientos. Estoy furioso, incrédulo, vengativo, justiciero, visceral, impotente, escandalizado y triste. Nunca como ahora me he sentido tan íntimamente afectado por un conflicto armado en esta vieja Europa que parece que no es capaz de desprenderse de cuantos tiranos dementes son capaces de alcanzar el poder para fastidiar a los demás. Nunca como ahora me han entrado tantas ganas de volar por los aires un tanque ruso. Nunca como ahora he disfrutado de ver cómo se desintegra un avión o un helicóptero ruso con un misil Stinger ucraniano. Nunca como ahora he disfrutado de saber que un francotirador ucraniano se ha cargado a un general ruso a kilómetro y medio de distancia. Nunca como ahora he deseado tan vehementemente ver la cabeza de Putin en alguna picota.

¿Será que ahora me siento más cercano al problema? ¿Qué ha cambiado? ¿La cercanía de la guerra, la desigual lucha, las simpatías que se ha ganado para siempre Zelenski? ¿Será el hecho de que todo dios en Ucrania habla español mientras aquí hay regiones en las que se le persigue? ¿Será que ahora soy neonazi?

Cada vez que veo en las noticias lo que están sufriendo los ucranianos a manos de los rusos se me hace un nudo en la garganta como si fueran mis vecinos. No puedo aceptar que un maldito enano de mierda, ex agente del KGB, someta a sangre y fuego a un pueblo pacífico que no les ha hecho nada excepto estar en donde están en el mapa. Ucrania ya sufrió en su momento las iras de los rusos cuando éstos arrebataron todo el cereal al país. Murieron de hambre unos 4.000.000 de ucranianos.

No entiendo por qué extraña razón me llena de orgullo escuchar el himno de Ucrania, aunque no entiendo absolutamente nada. Y aunque tampoco conozco al presidente, considero que ya se ha ganado un lugar en la historia. No entiendo por qué me llena de orgullo escuchar a los ucranianos que regresan a su país para luchar y defender su suelo, aunque lo más peligroso que han empuñado en sus vidas ha sido un cuchillo para comer carne. No entiendo por qué me enorgullece escuchar a las ucranianas decir que ellas también están dispuestas a luchar y a empuñar las armas cuando aquí algunas españolas, lo único que hacen es enseñar las tetas en la calle.

Me llena de orgullo español ver una vez más a José Andrés haciendo lo que saber hacer: dar comida al hambriento. Me llena de orgullo todos los españoles que le han echado agallas, han cogido el coche y se han plantado en Polonia, simplemente para llevar a alguien a un lugar seguro de Europa o traer a niños y acogerlos en su casa. Me llena de orgullo ver que hay españoles que se han apuntado a la legión extranjera, algunos con experiencia militar de sobra en otros conflictos. Me llena de orgullo saber que enviamos armas y tropas para ayudar a Ucrania.

Pero qué ha cambiado? Pues la razón es sencilla: yo.