sábado, mayo 10, 2014

Trenes sin conductor



No deja de sorprenderme el énfasis que se pone en buscar culpables, cuando se produce un accidente ferroviario. Culpables, que no sean el conductor, claro. Me sorprende, insisto. No me imagino a la gente haciendo manifestaciones cada lunes ante la DGT, o el Ministerio de Fomento, por los muertos en las carreteras del fin de semana anterior, como si los conductores de coches fuesen culpables de sus propios accidentes – que lo son en muchos casos – y se merecieran su destino, pero los conductores de trenes, no.

Me estoy refiriendo, claro, tanto al accidente de La Coruña del año pasado como al del Metro de Valencia de hace 8 años. Que digo yo que si llevan conductores, será para algo, no? Luego, si se quiere añadir más seguridad, pues nunca viene mal, pero en el bien entendido que la seguridad, cuesta dinero y habrá que ver si merece la pena o no, o si hay financiación para tales planes. Lo que está claro es que los conductores, están para conducir; igual que los de los autobuses.

De todas formas, si ahora de lo que se trata es de proporcionar la máxima seguridad a nuestros trenes, sean de corta, media o larga distancia, la solución es muy sencilla. Desde hace muchísimos años, los trenes, pueden circular perfectamente SIN CONDUCTOR. Mediante sistemas de seguridad controlados informáticamente, un tren funciona perfectamente y sin problemas. Si los conductores no son los responsables de los accidentes que provocan por ser humanos, se elimina ese puesto de trabajo y se sustituye por una máquina que no tiene sindicato, no se cansa, trabaja 24h al día, 7 días a la semana, no toma vacaciones pagadas y no hace huelgas ni pide aumento de sueldo. 
Por esa vía, llegamos al absurdo de provocar lo contrario de lo que se pretende. Ahora mismo, ya estamos viendo cómo se están desarrollando prototipos de automóviles, que circulan sin conductor. Tal vez sea esa la línea por la que haya que avanzar, la de dejarse guiar por robots. Lo cual, dicho sea de paso, está planteando ya dilemas en cuanto a quién sería el responsable en caso de accidente: ¿el que desarrolló el software que dirige al coche o el mecánico que lo conectó mal?.

(Por cierto, a quién pondría la multa la DGT?. Y los helicópteros de la DGT, ¿perseguirían sólo a los conductores humanos o a los coches robotizados también?).

La seguridad, tiene un coste, ¿estamos dispuestos a asumirlo? ¿De verdad queremos que en aras de la máxima seguridad, se pierdan puestos de trabajo? Porque lo que no tiene sentido es mantener a un señor o señora, por no hacer nada, no?

Con todo esto de las asociaciones de afectados por los accidentes del Alvia y de Valencia, y sus acciones legales, al final, ¿qué se pretende? ¿Qué salga un político de vaya usted a saber qué partido  y que declare que no se implantó el sistema “X” de seguridad porque no había fondos para ello o no se había presupuestado así? ¿Y qué? Pero si todos los proyectos de cualquier clase, sean del tipo que sean, tienen un presupuesto limitado. Y los conductores, que son humanos y cometen errores como todos, ¿son inocentes al 100%?.

Nos estamos empeñando en convencernos de que podemos resultar infalibles y me temo, que aunque haya mucha gente que sufra, hay cosas que no se pueden prever. Los accidentes se llaman así por eso: porque son imprevistos o no se cumplen las normas establecidas. El conductor del Alvia, iba hablando por el móvil mientras conducía un tren a 300 kms por hora. La DGT nos insiste mucho en que hablar por el móvil en un coche que circula a 80kms por hora, es casi mortal en caso de distracción. Pues más todavía si lo haces a 300, no? Exactamente el mismo problema que sucedió en Valencia: exceso de velocidad del conductor y desde el primer momento, se intenta buscar una cabeza de turco que elimine la responsabilidad de quien circulaba a una velocidad imprudente.

Muy curioso que cada vez que hay un accidente aéreo, lo primero que se piensa es en la responsabilidad del comandante. Igual que cuando hay un accidente de autobús. Pero cuando se trata de trenes, qué curioso!, los responsables son otros distintos a los conductores. ¿Será porque los muertos de una empresa de transporte aéreo, son muertos "privados" y los de los trenes, son "públicos"?. A ver si no va a tener nada que ver los muertos, sino el tipo de empresa del que se trate.

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