Mostrando entradas con la etiqueta elton john. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta elton john. Mostrar todas las entradas

miércoles, septiembre 13, 2023

Los traidores

A Jesús le traicionó Judas. A Julio César, Brutus. A Luis del Olmo, su íntimo amigo que se fugó con todo su dinero. Y hay más ejemplos. La cantante Belinda, Drew Barrymore, Beyoncé o Elton John, entre los extranjeros. Carmen Maura, Concha Velasco, Ana Torroja, son algunas de las españolas que también han pasado por ese mal trago. A ellas, se ha unido Arantxa Sánchez Vicario.

Lo de Arantxa está de actualidad estos días porque va arrastrando su vergüenza por los juzgados y los telediarios. Una cosa es no tener dinero para vivir y otra que, además, te persigan para que pagues, ya sea el banco, hacienda o ambos.

En realidad, poco importa cuáles han sido los motivos por los que, en un momento dado, lo has perdido todo o casi todo. Malas decisiones a la hora de invertir, despilfarro, caprichos, drogas, vicios…da igual. Al menos, en esos casos, el culpable sueles ser tú mismo, porque, incluso en el supuesto de que hubieras sido mal aconsejado, siempre podrías haber dicho “no” y no lo hiciste. Pero lo que realmente duele, aplasta y conmociona, es cuando la ruina te viene por la traición de aquel en quien confías, que, además, suele ser alguien muy allegado: padres, hermanos, íntimos amigos, etc. En esos momentos, es de suponer que te sientes como Jesucristo o Julio César. Y lo triste es que es mucho más frecuente de lo que aparece en la tele.

En estos días he visto la película sobre Elvis Presley, o para ser más exactos, sobre la garrapata o sanguijuela de su representante. No voy a desvelar nada de la peli para no reventarla, pero a mí me ha sorprendido conocer las interioridades del individuo en cuestión. En la peli queda claro que presentan a Elvis como un cautivo de un entorno diabólico formado por su padre, su manager y su médico.

En ocasiones, aquellos en los que confías para que te lleven las finanzas, o tu carrera profesional, se comportan como auténticas ladillas, exprimiéndote hasta la extenuación y viviendo a tu costa, mientras tú te matas a trabajar. Y un día te levantas y te das cuenta de que todo tu esfuerzo sólo ha servido para alimentar a unos parásitos, que se lo han llevado todo.

Algunos podrán recuperar parte de lo robado…trabajando más. Para un músico, un artista, un escritor, puede resultar más o menos accesible. Y entre éstos, no es lo mismo que te llames Perico de los Palotes, o Elton John. A este último, le robas 300 millones y lo mismo para recuperarse tiene que vender uno de sus castillos. Para un deportista, no.

Pero, sin duda, lo que más duele no es el dinero y las propiedades que ya no tienes. Lo que más duele no es la persecución inmisericorde a la que te someten los bancos o Hacienda. Lo realmente doloroso, es el beso de Judas o la puñalada de Marco Junio Bruto.